El mareo al usar un portátil en un coche proviene del conflicto entre tus sistemas visual y vestibular. Tus ojos se enfocan en una pantalla estacionaria, pero tu oído interno siente el movimiento del coche. Esta disparidad conduce a una confusión sensorial, resultando en mareos o náuseas.
Una forma simple de ayudar es detenerse y mirar por la ventana, permitiendo que tu cerebro reconcilie el movimiento. Alternativamente, prueba usar Carsick.app, que ajusta los visuales en tu MacBook para que se muevan en sincronía con el vehículo, ayudando a reducir el mareo al crear una experiencia sensorial más consistente.